LOS LEGENDARIOS.
Cap.1: Miradas.
Padre... padre... no...
Gritaba Feder en la pesadilla
que tenía todas las noches, el día de la ejecución de su padre.
Como te coja te are tiras
niñato- gritaba un mercader. Mientras el joven corría como una bala y se subía
por un póster para alcanzar la ventana de una casa y de esta subirse al tejado
y desaparecer.
El mercader estaba ya hasta
las narices del que ese joven le robara de todo.
El joven entra por una
trampilla que tenía en el tejado de su casa, la cierra y se dijere a la cocina
a soltar su pequeño botín: unas manzanas, una cuña de queso, una barra de pan y
como no las bolsas de monedas las personas que tenía cerca cuando corría
huyendo del mercader.
Como se ha pues- decía el
joven.
Al caer a la noche no había ni
un alma en las calles, solo los cuatro borrachos de siempre y las cortesanas,
Pero esa noche había alguien
más rondando por hay una persona que iba muy cautelosa cada instante mirando
para atrás por si alguien le seguí, iba observando también si había alguna casa
con alguna puerta abierta para entrar y esconderse, hallo un establo con la
puerta mal cerrada entro con mucho cuido mirando para todas direcciones y
observo que había comida en sima de la mesa y que la chimenea estaba encendida.
La persona misteriosa coge
parte de la comida y se sienta en el suelo cerca de la chimenea y comienza a
comer lo que la persona no sabía que es
que la estaban observando desde la puerta de la cocina. El observador avanza
con cuidado y mucho sigilo hacia la persona y con cuidado esta le coloca el
cuchillo en el cuello.
¿Quién eres y que haces en mi
casa?
Le decía la persona que tenía
el cuchillo.
La otra persona comienza a
levantarse, temblando
¿Volvió a preguntar quién eres
y que haces en mi casa?
La otra persona seguía sin
decir ni una palabra, el que tenia el cuchillo le quita la capucha que
estorbaba para poder ver la cara del intruso y vio que el intruso era...
¡Ostias!, no me jodas, decía
el que tenía el cuchillo.
Vamos que el intruso no era un
intruso si no una niña, con el la piel blanca, los ojos verdes, el cabello
castaño y muy temblorosa.
Hola Feder en cantado- decía
el joven apartando el cuchillo y dejándolo sobre la mesa, la chica seguía sin
decir nada, estaba temblando de miedo.
Me.... me... me llamo... Eimy-
decía la chica con una voz temerosa y tímida.
Feder la mira de arriba abajo
contempla que es bastante guapa, ¿cuántos años tienes? Le pregunta Feder
Ella responde que 11 años y él
le dice que tiene 12
También le pregunta que porque
se había colado en su casa, pero no dijo nada.
Como era tarde el le ofrece
que se quede a pasar la noche que durmiera en su aposentos el dormiría en la
cocina ser quita de la chimenea para no pasar frío.
Tras curio un rato la chica no
podía dormir se sentía insegura y no quería
causarle problemas a Feder decide marcharse entre las oscuras calles de la
noche. A la mañana siguiente Feder ve que la chica a desaparecido y escucha
mucho jaleo en la calle sale a mirar que pasa y a preguntar. Una mujer le dice
que van a sentenciar a muerte a la chica que mato a la hija del rey, el pidió
que le describiera a la chica y ella le contesto lo poco que sabía: que era
blanquilla de piel y con pelo castaño Feder pedía a Dios que Eimy no fuera a la
chica que iban a sentenciar a muerte en la hoguera y que la joven no tenía
pinta de ser una asesina.
Entro rápidamente en la casa
se fue para el establo y quito una gran tela de un cofre lo abrió y en su
interior había unas espadas trucadas por el padre, también cogió las cuatro
pistolas que había.
Se las fue colocando una
espalda en la cintura, una de las pistolas en el pecho, otra en la pierna
derecha, tercera parte de la espalda y la ultima en la parte delantera, se puso
capa con capucha y salió corriendo a la plaza de ejecución.
Vio a toda la gente del pueblo
que esperaba ver la ejecución. Feder paso entre la gente para ponerse en
primera fila, el verdugo subió primero al escenario donde iba hacer la
ejecución, la chica subió junto al cura
y al comisario del pueblo la gente comenzó abuchear a la chica, el chico no se
lo podía creer los que sus ojos veían la chica que hayo su casa la que le
ofreció cobijo iba ser sentencia a muerte.
Cuando el verdugo alzo el
brazo para tirar la antorcha a la hoguera...
se escucha un disparo cuyo
cual impacta en la muñeca del verdugo la gente del pueblo huye, el rey y el
marqués q contemplaban desde el podio se quedaron son prendidos tras ver que la
única persona que no se fue era la que disparo, pero lo que más le
sorprendieron era que solo era un niño. ¡Guardias a por él!
Gritaba el comisario. El chico
suelta una carcajada mira a su alrededor y tira la pistola que tenía en la mano
a uno de los guardias a la misma vez desenfundaba la espadas y se lanzaba al
combate, uno por uno los guardias iban cayendo sin heridas demasiado graves,
los guardias que más problemas de daban a Feder eran abatidos de un disparo
limpio en el cuello o en la cabeza.
Mientras el rey pedía que la
ejecución de la asesina de su hija siguiera el verdugo coge de nuevo la
antorcha y se dispone a tirarla, cuando en un acto reflejo de Feder es tirar la
estada a un póster secano al escenario para que esta se quedara clavada, corre
lo más rápido que puede hacia el póster coge impulso salta se apoya en la
espada para coger mas altura y a la vez se lanza a por el verdugo.
No puede ser decía el marqués
con una cara de asombro el joven había atravesado el pecho del verdugo de un
puñetazo, saca el brazo y deja caer al a su víctima iba muy resto y con mucho
orgullo hacia la joven mientras las personas que habían viendo lo que pasaba no
se podían mover del asombro de lo que solo un joven de doce años había hecho.
El comisario se interpone entre el y Eimy, Feder sonríe le apunta con la espada
y de pronto el comisario cae al suelo abatido de un disparo. Feder desata a la
chica y la coge en brazos esta estaba desmayada tras las heridas que tenia
seguramente pensó Feder que la abrían torturado, cuando se va a marchar el
marqués se interpone.
Hijo que has hecho, tanto
alboroto por una cría, te pones en el punto de mira de todas os soldados por
salvarla ¿tan importante es para ti? Le pregunto el marques
Feder le responde con un sí,
que no la conocía mucho pero no podía permitir que la mataran sin antes a verle
hecho un juicio justo. El marque le ofrece un caballo para que huya con la
chica.
Espera- le dijo de muevo el
marqués, te conozco y sé que dentro de unos años nos volveremos a ver. Tras
decirle esto Feder se marcha y el rey no podía creer lo que veía estaban
dejando huir a esos dos delincuentes.
Volvieron para la casa, Eimy
continuaba estando inconsciente, la llevo a la a sus aposentos preparo un
barreño con agua y paños para limpiarla y curarle las heridas. Feder pensaba
como le podían a ver echo todo eso a ella, le quito los trapos que llevaba, el
joven se sentía incomodo porque tenía a una chica desnuda delante de él,
comenzó a limpiarle las heridas para que no se le infectaran, a medida que el
cuerpo de Eimy quedaba más limpio mas heridas aparecían, tenía en las piernas,
en la espalda, en muñecas, casi todo su cuerpo estaba magullado. Tenía una
herida que no dejaba de sangrar y era una que tenía en la zona del lado
izquierdo era como si le fuesen clavado algo muy punzante y cortante.
La joven compenso a moverse,
de pronto abrí los ojos y se vio desnuda, cambio vio que tenia trapos con
sangre a su alrededor, intento levantarse de la cama para coger algo de ropa
para taparse, pero no tenía fuerzas por las heridas cae al suelo, rápidamente
Feder entra de nuevo a los aposentos para ver lo que había pasado solo había
salido un momento a coger un frasco que tenía una pomada echa por su padre que
la usaba para curar cualquier herida.
¿Pero qué haces en el suelo?
Pregunto el chico
Abrazándolo, no te jode ¡! le
contesto ella.
¿Me quieres decir que hago
desnuda? Pues desnuda le dijo él.
Feder le pidió que se tumbara
y se pusiese de lado para curarle la herida más grave que tenia de primeras.
Le comenzó a explicar lo que
había pasado y porque ella estaba desnuda.
Cuando acabo de curarla le dio
las gracias, este sonrío y se fue. Cogió una de las espadas y una bolsa de
monedas que el día anterior había robado, se dirigió para la calle. Eimy se fue
para la cocina tapada por una manta no le molestaba estar desnuda solo que un
chico la viese era raro para ella, tampoco comprendía porque la había salvado,
tenía muchas preguntas para hacerle pero no sabia a donde se marchó.
Perdone, ¿cuánto cuesta este
vestido?
Diez monedas joven le dijo el
mercader.
Compro el vestido, también fue
a comprar comida, muy atento y precavido por si alguien se daba cuenta de que
era él, el que salvo a la chica.
Compro un pollo, verduras,
fideos, hacia un poco de frío y pensó que Eimy llevaría mucho sin comer algo
caliente y quería sorprenderla, pero tenía que cuando llegara a la casa se
fuera marchado.
Decidió ir ya para la casa no
se fiaba de seguir más tiempo rondando por las calles, se cruzo con unos
guardias que llevaban un pergamino donde estaba dibujado los rostros de la
asesina de la hija del rey y el que la salva de que no fuera ejecutada. Feder
decidió que era mejor ir por los tejados que por las calles, mientras el volvía
tan rápido como podía por los tejados
mas guardias iban casa por casa preguntando si sabían algo de los dos jóvenes
que estaban en busca y captura.
Cuando pegaron en la puerta de
la casa del chico, Eimy fue abrí de pronto alguien la cogió por la espalda y le
tapo la boca con la mano, ella se quedo inmóvil ni respiraba, pero los golpes
de la puerta cada vez eran más fuertes, hasta que cesaron, Eimy seguía sin
mover ni un musculo, la persona que la tenia cogía la soltó y ella vio que era
Feder.
No podemos tardar mucho en
largarnos de aquí, le dijo él, estamos en busca y captura.
Eimy no dijo nada, le dio la
espalda se comenzó andar para el aposento, se sentó en la cama y comenzó a llorar. Diciendo-
no...No...Esto no puede estar pasando, no, por favor...no, solo fue un
accidente.
Mientras tanto Feder estaba
apoyado en la puerta, no sabía que decir, solo sabía que tenía que coger a la
chica y sus cosas y marcharse lo más antes posible, lo único que no sabía dónde
ir, solo tenía doce años y ya era uno de los
más buscados de ese pueblo, asesinato, cómplice de huida y revelación
contra la corona.
Se acerco a ella se coloco de
rodillas delante de la chica, le aparto el pelo y le acaricio la mejilla.
Por favor... deja de llorar
Eimy, tendrá solución, además unos ojitos tan lindos como los tuyos no de
verían derramar lágrimas.
La chica le miro, ya no
podemos hacer nada le dijo.
Cuando nos encuentren nos
mataran, te mataran a ti por mi culpa...¿ porque me salvaste?...¿ porque, no me
conoces de nada?
Sonrío y la abrazo, porque te
he salvado me preguntas, la respuesta es muy fácil...
Te he salvado, porque no iba a
permitir que te mataran injustamente, no sé qué abras hecho, pero mi padre
siempre me decía que si salvas a una mujer en apuros es porque un destello de
luz se cruzaron entre la mirada de ambos... ya sabes porque te he salvado.
Feder le entrego un especie de
paquete y se fue para la cocina, Eimy, lo abrió se quedo muy sorprendida de lo
q estaba viendo, era un vestido blanco con unas líneas azules bordadas y en las
mangas unos volantes dorados, no sabía si ponérselo, pero tampoco podía estar
todo el rato desnuda y tapada con una manta, se lo puso y se dirigió a donde
estaba Feder para que viera que tal le quedaba. Feder estaba preparando una
sopa para comer.
Feder puedes mirar un momento-
le dijo Eimy.
Feder se volvió ¡qué guapa¡ te
queda perfecto, ¿te gusta? Le dijo él.
Si me encanta, le contestaba
mientas sonreía y daba vueltas para que Feder pudiera ver lo bien que le
quedaba.
Así es como tienes que estar
sonriente, no le escondas tu sonrisa al mundo dejarla que la vean todos la
sonrisilla tan linda que tienes le dijo el sonriendo también.
¿No tienes intriga de saber
porque me querían ejecutar?
Ahora después me lo cuentas si
quieres, mientras comemos.
Eimy comenzó a explicarle lo
que paso:
Soy acusada del asesinato de
la hija del rey, pero fue un accidente. Nos trataba fatal a todos sus empleados
solo se preocupaba de ella misma, era una mal criada, si le contestabas te daba
con un bastón de plata que siempre llevaba con ella.
Pero hace cuatro días... me
golpeo con el bastón porque se me dé ramo un poco de té... estaba ya cansada de
que nos tratara como si fuéramos perros, no quería ni estar cerca de ella y
decidió ir para el jardín... pero ella salió detrás de mi...
Mientras le contaba a Feder lo
que paso Eimy hablaba cada con una voz muy apagada con las lágrimas saltadas,
en la miraba fijamente sin decir nada.
Ella continuaba contando lo
que ocurrió. Ella fue a pegarme de nuevo por haberle dado la espalda en, ese
momento cogí el bastón y la empuje pero lo que no sabía era que ella se iba a
caer... por la escaleras y.... y.... esto lo decía entre lágrimas... y iba a
morir...
el se levanto de la silla hizo
que se pusiera de pie y la abrazo acariciándole el pelo diciéndole que se
tranquilizara, que mientras él estuviera la protectoria.
Comenzó a prepara un baúl con
ropa de él, cargo las pistolas, las espadas las afilo todavía más.
Esperaron que cayera la noche
para marcharse, en el cofre donde él había cogía las espadas de su padre vi una
carta donde decía:
hijo si estás leyendo esto
significa que a mí ya me han capturado, perdonarme por dejarte solo, pero nunca
lo estarás desde el día que murió tu madre te está protegiendo.
Seguro con lo cotilla que
eres ya abras mirado en el cofre donde te tengo prohibido que mires.
Coge lo que veas necesario
y marcharte antes de que descubran que tengo un hijo y vayan a por ti.
Ve al bosque pasando por el
puente de piedra, desvíate un poco por la parte derecha y continua recto allí
encontraras una casa esconde te allí, también tienes cosillas para que entrenes
más y mejores lo que te dije.
Por cierto entra por la
puerta de atrás.
Tu padre que te quiere, te
cuidare desde el cielo junto a madre.
Tras terminar de leer la carta
Feder se la coloca en el pecho y la quema con una vela, para que nadie pudiera
volver a leer lo que tenia escrito.
Le dijo a Eimy a donde se iban
a ocultar, preparo el carruaje que tenía en el establo hato el caballo que le
entrego el marqués al carruaje, Eimy miro en la calle, por si acaso había
alguien que los pudiera ver, abren la puerta del establo y se marchan con la
luna acompañándoles, iban muy nerviosos los dos Eimy estaba preocupada por si
algún guardia se les cruzaba y Feder tenía que volver a luchar, a medida que
pasaba el tiempo el azotaba al caballo para que fuese mas rápido no se quedaría
tranquilo hasta que no llegaran a la casa del bosque.
Pero no iban ellos solos para
esa casa alguien más iba también, los seguía desde muy cerca, cuando llegaron
Feder hizo lo que le dijo su padre entrar por la parte de atrás de la casa
aunque no sabía por qué.
Cuando entraron escucharon una
voz que decía- yo que tu no daba un paso más, se veía una silueta, la voz era
grave como la de un hombre. Eimy cogió el brazo de Feder y este hecho un paso
para adelante, contentándole al hombre- ¿ quién es y que hace en esta casa?
El hombre se levanto y se dirigió a la puerta, casi no
se le podía ver, el joven poco a poco iba desenfundando la espada pero cuando quería
reaccionar tenía una daba en el cuello.
El hombre lo miro fijamente y
se echo a reír, vaya... vaya pero si tenemos aquí al hijo del Anthony decía
mientras alejaba la hoja de la daga del
cuello del chico. Ferder le pregunto que como sabia el nombre de su padre, este
le contesto yo estuve el día que naciste, estuve el día del entierro de tu
madre y también estuve el día que mataron a tu padre yo soy alguien que te
estaba esperando, mi nombre es Giovanni y soy un viejo amigo de tu padre uno de
los seis que seguimos con vida. Tras decirle esto salió de la casa
mientras le decía de nuevo a Feder sígueme, pero que ella se quede
dentro y cierre la puerta dentro encontrara velas que las encienda para que no
pase más miedo del que ya tiene.
El chico comenzó a seguir a Giovanni
sin decir ni una sola palabra, este lo llevo a un gran abeto, tranquilo chico solo voy a
contarte cosillas que ya van siendo hora de que sepas.
Tu padre era un gran hombre y
no murió injustamente como muchos piensan fue traicionado.
Traicionado decía el joven con
un gran grito. Giovanni le dijo que se calmara y escuchara... comenzó a
explicarle que desde niños siempre estuvo muy pegado al padre, que hacían travesuras
para poder sobrevivir en la calle y solo le dijo que tuviera muchísimo cuidado
con Telir líder de los legendarios, que ese hombre iría a por él.